Esa manía tuya.

René Magritte, Los amantes, 1928.

Esa manía tuya de hacerme sentir que te quiero,
que con sólo detener el despertador ya estoy en tu lecho,
que no necesito más hablar para saberte
y vivir así en un profundo silencio.

Esa manía tuya de hacerme soñar que fuimos y somos siempre,
que no hay música, ni poesía,
ni teoría necesaria para reafirmarme en ti,
que es prescindible lo trivialmente hermético,
lo trascendentalmente desechable.

Esa manía tuya de hacerme creer que te conozco,
cuando en realidad eres misterio vivo
que va más allá del magnetismo físico,
emocional, acaso intelectual.

Detente, no presumas ni finjas,
ya no lo necesitas,
tus brumas dieron fruto al fin,
y aquí estoy,
enamorado del intermitente vacío insondable que hay en ti.

Esa manía tuya no.

Gatojazz 18 de agosto del 2011.